Soñando un Tsunami: ¿qué significa, la interpretación y los números de la lotería
Hay muchos eventos y movimientos de la Naturaleza capaces de hacer que el hombre perciba su mortificante fragilidad y contingencia, cuando, entonces, estos nos aparecen en sueños causan los mismos efectos devastadores a nivel psíquico. Las catástrofes naturales parecen ser puestas ahí, a propósito, para recordarnos que nos despojemos de nuestras más fútiles aspiraciones y de toda la vanidad de nuestros deseos, mortificando todas nuestras pretensiones de dominio sobre el mundo exterior.
Por lo tanto, la imagen de una naturaleza violenta e irreversible, en las diversas épocas, ha sido siempre sinónimo de fuerzas irracionales e indomables, de materia caótica y magmática, fascinante precisamente por el misterio del que es portavoz y que no se deja abrir y ha ido asumiendo progresivamente, en la imaginación onírica humana, valores y significados muy precisos atribuibles a estas características. El Tsunami, o maremoto, se presta bien para sintetizar y convertirse en el portavoz de la fuerza devastadora del mundo natural, no sólo por su enorme poder destructivo, sino también por lo impredecible de sus ataques, así como por sus apariciones en la mente del soñador.
Por lo tanto, la imagen de una naturaleza violenta e irreversible, en las diversas épocas, ha sido siempre sinónimo de fuerzas irracionales e indomables, de materia caótica y magmática, fascinante precisamente por el misterio del que es portavoz y que no se deja abrir y ha ido asumiendo progresivamente, en la imaginación onírica humana, valores y significados muy precisos atribuibles a estas características. El Tsunami, o maremoto, se presta bien para sintetizar y convertirse en el portavoz de la fuerza devastadora del mundo natural, no sólo por su enorme poder destructivo, sino también por lo impredecible de sus ataques, así como por sus apariciones en la mente del soñador.
EL SIMBOLISMO Y EL SIGNIFICADO ONÍRICO DEL TSUNAMI
Es uno de esos sueños que sólo en raras ocasiones puede ser rastreado hasta una experiencia empírica real del soñador; en la mayoría de los casos, el icono del Tsunami es recreado psíquicamente de la nada, sin ninguna referencia externa, directamente extraído del inconsciente humano colectivo y declarado sobrecargado de fuertes significados simbólicos. En la literatura internacional, antigua y moderna, es muy frecuente la analogía de imagen entre las abrumadoras pasiones humanas y ese fenómeno físico-natural que indica una perturbación capaz de propagarse tanto en el vacío como en un material y que comúnmente llamamos ola; en particular la analogía se produce con las olas marítimas. Las pasiones, de hecho, ya se trate de un amor abrumador o de un apego morboso a una actividad deportiva, se presentan intuitivamente como algo perturbador, es decir, capaz de perturbar y alterar el equilibrio psíquico humano.
El Tsunami, entonces, que no es otra cosa que una gigantesca ola generada por un terremoto marino (maremoto), sería una expresión y manifestación de una pasión predominantemente abrumadora y desestabilizadora que ha penetrado en la virtud psíquica del soñador; un acontecimiento repentino e inesperado que abruma con toda su gravedad y energía a su anfitrión y no deja espacio para la reacción, excepto para permanecer como testigo pasivo de lo abrumador en sí mismo.
Es muy probable que el soñador se encuentre viviendo un período de su existencia caracterizado por pasiones particularmente obsesivas, que es necesario frenar en vista del redescubrimiento del equilibrio psíquico. Se trata de un acontecimiento que se percibe como preocupante no sólo para nosotros mismos sino también para los demás; esta imagen se refiere a un impulso interno vigoroso que no puede ser bloqueado o refrenado, o a una situación vital muy importante que requiere una solución rápida y eficaz. Recordemos que el mar y el agua, en general, poseen un enorme valor simbólico, siempre conectado con nuestras energías psíquicas internas, lo que en este caso sería chocante y violentamente desastroso.
ENORMES TRASTORNOS
El hecho de tener que lidiar, durante el sueño, con la imagen de un Tsunami estrellándose en tierra firme es un síntoma de los profundos trastornos experimentados durante los últimos días vividos; un alguien o algo que en nuestra vida se está estrellando sin medias tintas y perdiendo toda nuestra certeza. Sería bueno llevar a cabo una investigación apropiada y averiguar quién o qué amenaza nuestro equilibrio psíquico.
...GRANDES CAMBIOS
Además, esta imagen se refiere a menudo al crecimiento interior y exterior del soñador, también un gran cambio y acontecimiento biológico capaz de sondear las almas más tenaces; símbolo del paso de la juventud a la edad adulta que se produce de forma violenta e inesperada.
LA SEGURIDAD PERDIDA
Soñar con un Tsunami que destruye el hogar se refiere a uno de los miedos más ancestrales que se arrastran en nuestras profundidades psíquicas, el miedo a perder lo que es nuestro hogar, el lugar de nuestra seguridad y el hogar de nuestros afectos más duraderos; el hogar es también el símbolo de la identidad de un individuo, perderlo significaría perderse y no poder encontrarse a sí mismo de nuevo, perdido en la labilidad habitual de los acontecimientos.
LA CÁBALA Y LA NUMEROLOGÍA
Para aquellos que quieran probar suerte, apoyándose en el misticismo numérico, los números sugeridos en este caso para el Tsunami y las Olas son: 37-55-39.
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